Uno de los jitazos que utilizo en la Cuesta de Garabitas, cuando la calor y/o la resaca aprietan.
Ver para creer, escuchar para correr.
Y la desarmante certeza de las abisales simas retrofuturistas que alcanzó aquel visionario de estepario apellido y pobladísimas patillas.
Esto, seamos serios, nunca podrá sonar bien en un ipod desos. Ni falta que hace.
Vds., ya saben, a lo suyo, festivales para retardados y macroconciertos estivales de mucho pitorreo.
Descanso activo, que se dice. País.
5 comentarios:
jooooooooooder esto es de nota ,el principe gitano en ingles tanpoco tiene desperdicio.
Ehhh ehhhh a tí que coño te pasa con los aipoz???
Suenan mucho mejor que los vinilos.
Miguel dixit
Doy fe que una vez, hace unos 10 años, cerca de la torre Picasso, en Azca, Valerio me lanzó una mirada zoom-zoom lasciva a lo conde Drácula rumano sediento de sangre fresca y lozana...
(seguro que gripaba con las braguitas de Marisol)
Lucía cinturón de botellas y riñonera fantasía?? El Lazarov, digo. Con el pelaje que le entra a Vd., no me extrañaría.
Amigo Morán, nada suena mejor que un vinilo, excepto el crepitar del musgo serrano bajo mis Salomon y los ñascos rodando ladera abajo en el Herri Krosa de Mutriku.
¿Pero para series o fartek? Que no todo vale para todo...¿ehhhh?
Baci e abbracci
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