Hoy, Panceta Nation, les acerco la estilizada figura de un corredor legendario. "Pre", como le conocían miles de fans en todo el mundo, es considerado uno de los mejores fondistas de la historia y uno de los más importantes impulsores de la carreras de fondo en USA.
El James Dean del atletismo, el Rayo de Oregón, que dejó un cadáver extraordinariamente bien parecido, al estrellar su deportivo contra un muro, minutos después de abandonar una fiesta en la que litros de alcohol corrieron por las venas de los invitados (nuestro héroe también chupó lo suyo, según parece).
De esta desgracia se cumplieron el pasado 30 de Mayo la friolera de 33 años. Sniff.
Tenía 24 años y toda una vida trufada de éxitos runneriles por delante. Y de poesía, sí, carnales, porque el bueno de Pre era un poetastro de campeonato.
Era frecuente escucharle comparar la Media Maratón con la Victoria de Samotracia o un 10K con Las Meninas, sobre todo cuando batía algún record o se tomaba unas Rolling Rock con sus compadres de club.
Un modelo para generaciones futuras (la actual ya tiene los suyos, personificados en seres como el Nadal o el Alonso), como tantos y tantos otros recordados con cariño en este su blos detox de cabecera.
Les dejo con algunas de sus citas más emblemáticas (yo estoy ya pensando en fusilarle alguna y soltarla entre el km. 5 y el 8, así, susurrándosela al oído a alguna suripantilla runner o en currarme una lectura guapamente sensible en la próxima performance poetastra que organicen Pepeltenso y sus secuaces):
"Lo que quiero ser es el número 1"
"Dar menos de lo mejor de tí es sacrificar El Regalo"
"Alguien podría ganarme, pero le va a costar sangre"
"Es algo más que correr. Es estilo. Es hacer algo mejor que el resto. Es ser creativo"
"Mucha gente corre para ver quién es el más rápido. Yo corro para averiguar quién tiene más cojones".
And so on. Un pensador de nuestro tiempo, como sin duda apreciarán la mayoría de Vds., personas con clase y estilo, pese a su preocupante curva del colesterol.
Yo, de momento, correré en Otoño el Steve Prefontaine Memorial Run, que termina en el mesmito high school donde nuestro héroe entrenó por primera vez. Seguro que mejoro marca.
Nos vemos en La Florida, si el tiempo y la autoridad lo permiten.
7 comentarios:
como le siga dando a la poesía acabará como el merak ese
si si, el james dean runneril, pero con ese mostacho me recuerda más al Robert Redford de Dos hombres y un destino. Lo de este tío me confirma, one more time, la convivencia de buena vida vs mala vida, que algún día deberíamos testear entre los sufridos corredores
La última de las citas es i-m-p-r-e-s-i-o-n-a-n-t-e.
Sentimientos ambivalentes. Por un lado esto de la rebeldía está siempre bastante bien. Por otro, terminar empotrado en un muro dice poco de la sesera que te acompaña: no hay manera más ineficaz de mostrar tu rebeldía a largo plazo que estamparla contra unos ladrillos.
Yo prefiero la gente igual de rebelde pero que viven para comprobar cómo el tiempo va modelando a ala hostia sus principios. Uno pasa de rebelde ciego a renegado; estado mucho más satisfactorio para uno mismo y para la blogosfera, ya puestos
Fdo Rockabilly Rebel.
SPJ (y me llevo este trozo a mi blog, me acaba de dar pie Ud a un post)
Usted corre para que sepan si tiene cojones o tiene cojones de salir corriendo cuando lo averiguen.
saluditos!
joder Alevosa, no sabe Vd. lo que celebro sus siempre agudas disquisiciones. Ya era hora.
Para máximas con elevado contenido poético las de Chuck Norris
"De adolescente, Chuck Norris dejó embarazadas a todas las enfermeras de un convento perdido en las colinas de la Toscana. Nueve meses después, las enfermeras dieron a luz a los Miami Dolphins de 1972, el único equipo imbatido de la historia del fútbol americano profesional."
"Chuck Norris ha contado hasta el número infinito… dos veces"
"Chuck Norris puede dividir por 0"
...y así.
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