Se vende la guía con la que hemos pasado de ahogarnos al perseguir al descuidero de turno a terminar una media maratón (21 kilómetros, que el otro día una persona culta me preguntó lo mismo). Se dice pronto, pero, amigas, hay que correr la distancia previa a La Gesta de los 42 para saber de qué va sufrir de veras. Y disfrutar de veras, que también. Así que, barato barato, amigo.
Al asunto: pedazo de madrugón que me casqué (no conocía la zona de salida de la carrera) y que frío que hacía (corrí de corto) y qué desazón empezar a ver esos gemelazos y esos outfits de club de atletismo (una vez más) hasta el punto de replantearme seriamente mi presencia allí, entre tanto crack popular y tanto viejuno con pinta de hacerse los 21 kms. a ritmo de 5K.
La dignidad, la capacidad de sufrimiento acumulada durante todos estos meses y los 10 eurazos que había apoquinado días antes, amén de la contemplación de varios shorts de marcas punteras en los que se embutían unos traseros femeninos de órdago la grande, hicieron que me decantara por santiguarme a pie de salida y vamos pallá.
Qué sabia decisión, lorzas con patas, qué acertado el participar en semejante prueba. Las horas y horas invertidas en entrenamientos a deshora y en descampado, con la única compañía del último de Cobra Verde o el Zenith de Gainsbourg (ésto último es coña, patancines, quién va a entrenar con semejante truño "live", con la de discos geniales que nos legó el Hombre), y sufriendo más mofa y befa que el Babe de Marathon Man cuando volvía a casa de entrenar, han dado su fruto.
Hora y cincuentaypico. Y sin pararme a caminar ni una sola vez, pese a que a partir del kilómetro 10 comenzaron las no por anunciadas menos temidas cuestas (de kilómetros de longitud, atiendan). Menos de dos horas. Chapeau.
Tantos redaños tuvieron su justa recompensa en una estupenda camiseta técnica de hórrido diseño pero idóneo material para los entrenamientos u otras carreras similares a ésta (lo de correr con la camiseta del Che o de Return of The Living Dead está muy bien en primavera u otoño, pero con frío o calor se impone la mariconada técnica, no hay color).
Creo que ganó otra vez el milico pacense. Qué animal. No le destinarán a Afghanistan, no. A mí me sacó 3 cuartos de hora. Debía estar entrando otra vez de guardia cuando yo iba por la cuesta. Y qué me dicen del pobre Belinchòn, debe estar hundido, le han salido unos competidores intratables de un par de años a esta parte. Creo que en esta ni participó.
Les veo el domingo en el Ecozar, no olviden runnerizarse y desbarrigarse.
5 comentarios:
Enhorabuena caballero, prueba superada!!! yo nunca me he atrevido [ni me atreveré] con una media, y mucho menos con una maratón. Asi que solo puedo expresarle mi más profundo respeto por acabar de esa manera tan exitosa su 1ª media. Le advierto que para la maratón se frote los sobacos con grasaza del cocido del sabado y ponerse unos velcros en los pezones por aquello de la sangre... le pongo un 9.
Joder, pensaba que no te atrevías con las MM, pero habrás visto que tienen su punto. Yo al final no puder ir aunque reconozco que mi excusa era como las que usaba caminero para no jugar los Derbys (una torcedurica de tobillo). Un saludo, coincidiremos en Fuenlabrada si bajo el Codillo con rusa que me acabo de encalomar.
Dario
La guía parece haber tenido efecto; pero espérese que asimile yo y aplique toda la información de "técnica de carrera" que estoy recopilando, y ya verá ya, qué piruetas a la intemperie.
Al menos me servirá para recaudar propinas de los transeúntes...
norabuena figura!!
Y claro, fuiste a elegir para debutar una media suave, comoda, sin riesgo :-)
Lástima no saber que andabas por alli para habernos saludado.
Pues nada, bravo, bravo!!
Y ahora saborea esos recuerdos (y los dolores varios) q te habrá dejado.
y preparate, porq esto de las medias es probar el vicio y no parar...
¡¡Felicitaciones por la media!!
Sin duda es el paso fundamental (mental) para darse cuenta que se puede...
Sin duda tendrás Éxito en la Maratón!!
Saludos desde Bahía Blanca, Argentina
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